El huracán Helene amainó su potencia en su paso por el estado de Georgia y bajó a tormenta de categoría 1 después de haber tocado tierra en la noche de este jueves en el noroeste de Florida como un devastador huracán de categoría 4.
Pero según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés), pemanece con vientos de 145 km/h y continúan las marejadas ciclónicas, los vientos y las lluvias que ponen en peligro la vida.
Antes de la llegada del huracán, las autoridades habían instado a la población a acatar las órdenes de evacuación. Cuando tocó tierra en Florida lo hizo con vientos máximos sostenidos de 225 km/h y una marejada ciclónica «catastrófica».
Dos personas han muerto en el condado de Wheeler, en Georgia, según ha informado el forense del condado a la cadena estadounidense CBS News, socia de la BBC.
